jueves, 1 de mayo de 2014

LUCIFER Y SU REBELIÓN


 




ESTE ES UN VIAJE A LOS ANALES DE LOS TIEMPOS! ¿En serio te atreves a visitar conmigo LA REBELIÓN DE LUCIFER? Si es así, sigue leyendo...



El motivo de esta entrada es una conversación que he mantenido con unas personas bastante importantes en mi vida. En ella ha salido a colación (que cosas!) el tema de cómo y porqué se rebeló Lucifer. Una de las personas hablaba de "cuentos", y la otra permanecía en silencio. De repente dije que si, obviamente, debía de tratarse de un cuento, pero como todo cuento, seguramente tenía su moraleja, porque, ¿qué es Dios?, ¿contra qué exactamente se rebeló Lucifer?. Y es tan inescrutable lo expuesto que lo más prudente sería no hacer otra cosa que permanecer en silencio. No hay forma de poder explicarlo ni entenderlo. Pero nadie dijo que yo fuera prudente, y, como siempre, hay algunas pistas que nos pueden ayudar a plantearlo con limitado rigor, al menos. ¿Te animas? 


Bueno, en primer lugar, ¿quién era Lucifer? Pues ni idea, para qué os voy a engañar, no tengo ni la más remota, pero si hacemos caso a lo que se dice por aquí y por allí llegamos a las siguientes conclusiones:

- Arcángel, lo que es arcángel como tal, sólo lo es seguro (según la Biblia) Miguel, el cual, como jefe del ejército celestial, es de suponer que enfrentó a las huestes rebeldes, con Lucifer a la cabeza. Un arcángel es el mayor nivel evolutivo de la "CORTE" celestial. Luego, aunque la Biblia no los nombra como arcángeles, popularmente se les da ese título también a los ángeles Gabriel y Rafael. 



- A Lucifer lo define Isaías como brillante estrella, hijo de la Aurora, acusándole de querer ser como Dios, lo cual fue el origen de todos sus males (no les vamos a culpar, ¿no?, ¿a quien no le gustaría ser omnipotente y omnisapiente?). Y Ezequiel nos dice de él que "eras perfecto en tus caminos desde el día en que fuiste creado". Según ambos profetas, era un querubín, no un arcángel (aunque hay mucha gente empeñada en que lo sea). Los querubines, cuyo nivel evolutivo está varios puestos por debajo de los arcángeles, guardan el umbral final, la última puerta antes de unirte con el Todo. Esta proximidad continua a Dios fue probablemente lo que hizo que Lucifer fragurara su rebelión, pensando que él podría ser también como Él y fracasando estrepitosamente en su intento. Por esto fue castigado a pasar a la historia como el más vil entre los viles. 


Bueno, esta es la historia, como nos la han contado. Pero, como alguien dijo, "la historia la escriben los vencedores". Y eso es bien cierto. Luego de esta rebelión (que ni podemos imaginar, ya que se trata de entidades espirituales, y no luchaban con espadas y pistolas precisamente), Lucifer cayó en desgracia, y se convirtió en el enemigo,  vilipendiado y castigado, su nombre cambió a Satán, o Satanás (enemigo en arameo), adjudicándosele el nombre de diablo, o demonio (, y se le acusó de las peores cosas, desde ser la serpiente que incitó a cometer el pecado original a ser el terrible espíritu que está continuamente tentándonos para que pequemos, y así saciar su sed de almas con las que nutrir su particular ejército (en el infierno) para levantarse una vez más contra el poder Supremo al final de los tiempos. 

Personalmente, me parece que toda esta historia es una simple parábola (recordemos que Cristo no hacía más que explicar con ellas las cosas) y que nos intenta inculcar un mensaje: NO TE REBELES CONTRA QUIEN TE DOMINA, PORQUE VENCERÁ, Y TU CASTIGO SERÁ TREMENDO.

Qué reflexión, ¿verdad? Al menos da que pensar... un poco... 

Algún día hablaré de la estatua del ANGEL CAIDO de Madrid... pero eso será en otro momento. Es hora de despedirse. Que sueñes con... los angelitos... 














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